Alice Guy es la primera y única mujer directora de cine, productora y propietaria de une studio de rodaje durante los primeros quince años de la Historia del Cine y, en consecuencia, una pionera de la cinematografía. Pero no lo es solo por su condición de mujer, sino como cineasta pionera del cine de los orígenes y del cine de integración narrativa; la única que ve nacer el espectáculo cinematográfico y sobrevive a las constantes transformaciones de la industria en sus dos primeras décadas de existencia y a ambos lados del Atlántico. A lo largo de 25 años, Guy desempeña simultaneamente varios oficios dentro de cinco sistemas de producción diferenciados y sabe adaptarse tanto a la evolución del lenguaje y técnicas cinamtográficas como a los cambiantes gustos del público, consiguiendo numerosos exitoas de taquilla en dos contextos muy distintos pero igualmente competitivos.