¿Cómo resistir a la lenta agonía de la lógica neoliberal y su asfixia cultural? Esta cuestión subyace en toda la obra de Mark Fisher, el primer pensador que hizo de su blog un espacio experimental de comunicación; teórico y activista cultural que reflexionó sobre su origen de clase, profesor de enseñanza secundaria y miembro, en sus inicios, de la CCRU, un colectivo interdisciplinar de académicos, artistas y estudiantes dedicados a la investigación cibernética -del que se distanció posteriormente-. Fisher supo ver tanto en la cultura de masas como en la contracultura contemporánea, especialmente en la música popular y la escena pospunk, una posible respuesta estética y política a lo que llamó «Realismo Capitalista».
Leer al pensador ‘modernista popular’ británico hoy ayuda a plantear los términos de la batalla cultural que se está librando en el capitalismo tardío. Su trabajo como catalizador, crítico musical y profesor no sólo ha influido a toda una nueva generación de lectores, sino que brilla como un lúcido ejemplo de teórico comprometido ante las insidiosas realidades de la cultura digital y sus patologías.