Líneas invisibles separan los espléndidos centros urbanos de las grandes extensiones de ladrillo visto y toldo verde. En una de esas fronteras, la que separa Barcelona de LÆHospitalet, se encuentra el Collado, una casa de comidas que sirve platos de escudella y fricandó a los trabajadores del barrio de Collblanc. Son los años noventa de la Barcelona exultante y olímpica, pero el Collado sigue siendo un negocio familiar que necesita del trabajo de todos sus miembros. Para el narrador niño (y luego adolescente) la barra del bar es una atalaya desde la que observar las miserias y virtudes de una parroquia entre la que hay prostitutas, mafiosos de medio pelo y perdedores de todo tipo. También es la carga que impide a su familia disfrutar de una normalidad con la que sueña, su maldición.Carles Armengol utiliza su experiencia como niño de bar, camarero involuntario y observador perspicaz para dar forma a un texto híbrido que es a la vez novela, estudio sociológico y diario personal. Un texto que disecciona, a través de la tragicomedia y el costumbrismo, las relaciones de amor-odio que generan todas las maldiciones