A partir de la Ley General de educación de 1970 se recuperan en España las escuelas mixtas, a las que asisten niños y niñas. ¿Supone este cambio que ya existe igualdad educativa para los hombres y las mujeres? Y si no es así, ¿en qué aspectos sigue existiendo la desigualdad y cuales son sus consecuencias? Estos son los interrogantes de los que partió la autora en la etapa de aparición del feminismo y que ha seguido investigando para ir identificando las piezas de una educación androcéntrica y sexista, nefasta para las niñas y para los niños, y que sin embargo no se reconoce como tal. Transmitimos los estereotipos sin ser conscientes de ello; no somos responsables de la cultura que recibimos, pero si de la que vamos a dejar, de modo que es importante descubrir las formas actuales del sexismo educativo, construir la mirada violeta y cambiar la cultura y los hábitos escolares, para que niñas y niños se liberen de las imposiciones de los géneros y sean, finalmente, iguales y libres de elegir sus vidas. Esto es lo que aporta este libro, en el que, a través de diversos artículos, se construye una teoría de la coeducación.