La sublevación de la Comuna en la Francia de 1871, tan breve como creativa, cuenta con una bibliografía impresionante que se ha enriquecido con motivo de su 150 aniversario. Albert Ollivier, consultando documentos que comenzaron a publicarse medio siglo después de la sangrienta represión, ofrece aquí una sugerente interpretación de tal acontecimiento, en busca de una explicación del carácter a la vez excepcional y fecundo de las revoluciones. Como historiador, Ollivier nos permite entender la Comuna, mostrando el desarrollo de los procesos autogenerativos que las revoluciones contienen. Y con ello nos permite comprender una historia que se hace, que se está haciendo a modo de desenvolvimiento inédito, que hay que fijar de forma posterior. El libro se completa con otros escritos tanto coetáneos (Louise Michel, Mijaíl Bakunin, Piotr Kropotkin) como posteriores que muestran hasta qué punto un acontecimiento como la Comuna revela algo del sistema social al que afecta y al mismo tiempo nos introduce en el problema de su evolución, lo que permite que un estallido como la Comuna contenga el inmenso valor de la act