Publicamos en este volumen uno de los textos capitales de la teoría política y del liberalismo, el célebre discurso que Benjamin Constant pronunció en el Ateneo de París en 1819. Marcado por la experiencia de la Revolución francesa, y por la deriva despótica de un republicanismo que había empleado la «voluntad general» rousseauniana para instaurar el Terror, el autor estableció aquí la famosa distinción entre la libertad de los antiguos y la de los modernos; esto es, entre la libertad propia de las repúblicas de la Antigüedad y la libertad de las sociedades modernas, posteriores a la Revolución. El discurso se complementa en este volumen con «La libertad de pensamiento», capítulo extraído de la obra cumbre del autor, 'Principios de política aplicables a todos los gobiernos'.