Este libro revela la experiencia del dramaturgo Calonge con su compañía La Zaranda. En el teatro las palabras no se detienen, las frases más que en el papel quedan en la tensión del aire. El autor quiere ir más allá de los diálogos dramáticos de sus actores/personajes, para encontrarlos sin el refugio actoral, arrumbados en la memoria y, a modo de responso prosaico, despedirlos.