«SOY GRETA THUNBERG, TENGO QUINCE AÑOS Y HABLO EN NOMBRE DE LA JUSTICIA CLIMÁTICA. ESTE ES UN GRITO DE SOCORRO.» El cambio climático pronto será irreversible.
Los políticos no van a reaccionar.
Tal vez tú sí. #huelgaporelclima Greta Thunberg es una adolescente sueca que se ha propuesto luchar contra el cambio climático y por la supervivencia del ser humano. En agosto de 2018 comenzó una huelga escolar los viernes que ahora siguen cientos de miles de estudiantes en todo el mundo. En diciembre de 2018 fue invitada por las Naciones Unidas a hablar en la cumbre sobre el cambio climático. Poco después atravesó Europa en tren para llegar a la fría ciudad suiza de Davos, donde se alojó en una carpa, para hablar ante los líderes del mundo en el Foro Económico Mundial: «Quiero que entren en pánico -les dijo-. Quiero que actúen como si nuestra casa estuviera ardiendo. Porque así es». Hoy, Greta Thunberg es candidata al Premio Nobel de la Paz. Este volumen indispensable recoge todos sus discursos. La crítica ha dicho...
«La princesa (com)promentida. Lo suyo es de película, directamente, de cuento. La nueva flautista de Hamelín se lleva a los jóvenes de calle e inquietos a los gobiernos con su activismo medioambiental.»
Elle «Greta habla para ella, para su generación, pero también para sus hijos y, más allá de los seres humanos, para la Tierra entera, en su preciosa y frágil belleza. Escuchémosla. Tal vez todavía estemos a tiempo.»
J. M. G. Le Clézio, Premio Nobel de Literatura «Invitar a Greta Thunberg es un acto de alto riesgo. La adolescente sueca de dieciséis años ha irrumpido como un ciclón desde ese ente abstracto llamado sociedad civil para devolver la lucha contra el cambio climático a un primer plano. Su retórica deslenguada ha cautivado a cientos de miles de estudiantes y la ha convertido en una suerte de estrella pop. Su estela deja altas dosis de reproches a unas élites habituadas a la complacencia y acostumbradas a emplear ante los jóvenes un discurso cargado de buenas intenciones, pero a menudo vacío y paternalista.»
El País «La generación Z o post millenial tiene un nombre de mujer: Greta Thunberg, una escolar sueca de dieciséis años cuya protesta contra la inacción de los gobiernos frente al cambio climático se ha extendido como un reguero de pólvora por numerosos países.»
La Vanguardia «Todo es inquietante en Greta Thunberg. Su mirada, su sonrisa jamás completa, sus frases cortas llenas de contenido, sus silencios, su timidez. Y la incapacidad de mentir y de dejar pasar las cosas, la obstinación, la nobleza, la sinceridad, la carencia de maldad o la certeza de que no hay grises, al menos cuando se trata de la supervivencia de la especie humana.»
Carlos Márquez Daniel, El Periódico «Es irónica, directa, a veces sarcástica. Lo opuesto de tierna. [...] Como una Casandra en la era del cambio climático, su acto solitario de desobediencia civil la ha convertido en un producto mundial. Ha inspirado numerosas manifestaciones de niños en otras partes, ha iniciado un debate sobre si los niños deben faltar a la escuela a favor de la acción contra el cambio climático.»
The New York Times «Un grito [...], un testimonio escrito ahora que el presagio de un desastre avanza hacia nosotros. El grito, la ansiedad de un niño o un adulto, tiene un significado más profundo: criticar las adversidades, evitar la muerte. La propia crisis de una familia es, en realidad, una prueba de su inteligencia.»
Sverker Sörlin, Dagens Nyheter