A través de la sensual historia de un triángulo amoroso entre una irresistible prostituta, su golfo Blancura -compositor y ladrón de letras ajenas de samba y malandrín recreado de un personaje real, Sílvio Fernandes, muerto loco a los veintisiete años-, y uno de sus más apasionados clientes, Sodré, en Desde que la samba es samba se narra la historia y cotidianeidad de la década del veinte en Rio de Janeiro, momento del nacimiento de la samba moderna en el barrio Largo do Estácio, zona de meretricio. La trama, sostenida en este triángulo, está matizada con sensualidad vigorosa, ritos religiosos afrobrasileños, estibadores y marineros, cafiches vestidos de blanco con corbatas bermellón y pequeños delincuentes, homenaje al modernismo brasileño que renovaría la cultura del país.