A Thomas Carlyle (Ecclefechan, Escocia, 1795-Londres, 1881) puede considerársele, con justicia, uno de los historiadores y ensayistas más influyentes en la Europa del siglo XIX. Fue un pensador reaccionario, más que conservador, pero dueño de un personalísimo y muy vigoroso estilo. Su Sartor Resartus es una deliciosa y extraña novela y también una de las cumbres de la literatura irónica inglesa junto a su igual El asesinato como una de las bellas artes de Thomas de Quincey. Sus obras más apreciadas en el tiempo son La historia de la revolución francesa (1837) y Los héroes (1841). Su ensayo sobre el nebuloso y contumaz dictador paraguayo, El doctor Francia (1843), obra de indudable interés en el ámbito hispánico, trata de un asunto (el de las dictaduras) que por desgracia no ha perdido actualidad en más de un siglo y medio. Hasta el momento nunca había sido editada entre nosotros, aunque sí en Buenos Aires.