Cuento de viejas, la novela más representativa del naturalismo inglés, narra la historia de una familia de
comerciantes de las Potteries (la famosa región productora de alfarería del centro-norte de Inglaterra) a lo largo de
tres generaciones, desde los años sesenta del siglo XIX hasta comienzos del XX, en el marco de las transformaciones
sociales y tecnológicas que tienen lugar en la Inglaterra contemporánea, salvo el Libro III, que se desarrolla
íntegramente en Francia, siguiendo las peripecias de una de las dos protagonistas, Sofía y Constanza Baines, y está
dominado por el clima creado en París por la guerra franco-prusiana de 1870. El título nos remite al final, cuando las
protagonistas (dos hermanas al principio adolescentes) son ya ancianas y, tras haber llevado unas vidas divergentes,
vuelven a confluir en su última etapa.