Reflejado en la figura de la joven rebelde protagonista de esta novela corta y en su hermano Gaguin, en ciudades que prefiere dejar a la imaginación del lector, donde habla de la fugacidad de la vida y del amor, uno de los temas constantes de Turgueniev, con el estilo que al autor ruso caracteriza, cargado de talento, profundidad de análisis y estilo literario dotado de minuciosas y profundas observaciones descriptivas