Se sabe que Charles Bukowski y Robert Crumb, cronistas complementarios de la vida y las pesadillas en los pliegues más incómodos de su sociedad, se vieron una sola vez, y que se profesaban admiración y respeto.
«Para mí -opinó Crumb sobre Bukowski- dice las cosas como hay que decirlas. Creo que para ser artista o escritor en el mundo moderno hace falta una fuerte dosis de alienación. Si eres muy equilibrado, no tienes nada interesante que decir».
«En la gente que él dibuja -dijo Bukowski sobre Crumb- hay energía y resplandor. Una de las personas más verdaderas que he conocido. Sería para mí un mágico honor que ilustrara algunos de mis ruinosos personajes».
Entre 1975 y 1984, Robert Crumb ilustró los tres notables relatos que componen este libro: «Tráeme tu amor», «No funciona el negocio» y «Bop, bop, contra aquel telón», historias de perdedores obsesionados por la precariedad laboral, el alcohol y el sexo, a quienes la realidad controla para que no puedan salir de donde están.