En un mundo donde la tasa de suicidio se ha vuelto incontrolable y el debate sobre la dignidad en la muerte se hace cada vez más necesario, tras años de arduas investigaciones y pleitos, la ley que regula la eutansia y el suicidio al fin se ha aprobado. Pronto los gobiernos se ven incapaces de atender a través de sus servicios de sanidad pública la creciente demanda de muerte voluntaria, surgiendo un nuevo mercado del que se alimentan desde multinacionales hasta empresas familiares. Inmerso en esta lógica mercantilista, Morthotel, antiguo hotel de lujo, se ha reconvertido en un centro de asistencia en la muerte sólo para la alta sociedad. La búsqueda de rentabilidad empuja a los jóvenes ejecutivos a idear nuevas líneas de productos, que incluyen las más excéntricas maneras de morir para captar clientes y desbancar a la competencia. Entretanto, un ubicuo gurú ha extendido su delirante fe reencarnacionista y desquiciados grupos terroristas tratan de imponer un caos que acabará favoreciendo al Nuevo Orden Mundial, en el que corporaciones globales pretenden imponer la democratización de la muerte. Morthotel es la primera novela de Alberto Gismera, inicio de su ambicioso proyecto Vaciología o «trilogía del vacío». «Se divide en tres grandes secciones. La primera tiene por título "Descanse en paz" y está dedicada a fallecimientos en lecho. Además de inyección, se ofrecen distintos servicios complementarios: sábanas de distintos tejidos y colores, actores profesionales que harán de familiares o amigos y que interpretarán los papeles que el cliente elija. Música clásica, jazz, new age, todo tipo de inciensos y esencias, y extremaunción proporcionada por sacerdotes auténticos. La segunda sección, "A su manera", ofrece todo tipo de posibilidades de inmolación: venenos, drogas, cuchillas, sogas y armas de fuego, y una subsección especial para saltos al vacío. La tercera sección está dedicada a los "Servicios post mórtem": subdividida en secciones de ataúdes y urnas, coronas, cementerios y ceremonial».